Con profundo pesar, Fundación Arturo López Pérez (FALP) informa el sensible fallecimiento de Alfredo Comandari García, Presidente de la Fundación, hoy viernes 17 de enero.
Su partida deja un inmenso vacío en su familia, en nuestra fundación y en todos quienes tuvieron el honor de conocerlo y el privilegio de trabajar junto a él.
Alfredo Comandari se integró a FALP en 1986 y asumió la presidencia del Consejo Directivo en 1998. A lo largo de estos casi 30 años, centró su vida en un propósito claro: que todas las personas, sin importar su origen y condición, tuvieran acceso a una atención digna y de
excelencia. Su meta fue que FALP alcanzara estándares de calidad comparables a los mejores centros oncológicos del mundo, manteniendo el espíritu de servicio público con el que fue fundada.
Bajo su liderazgo, se concretó el traspaso de la administración de FALP al sistema privado, la ampliación de sus servicios y la construcción de nuevos centros de atención, para estar más cerca de los pacientes y sus familias. Asimismo, se logró la acreditación como Cancer Center
otorgada por la Organización Europea de Institutos de Cáncer (OECI) y se dio inicio al proyecto de futuros Institutos Oncológicos en las regiones de Los Lagos y Valparaíso, consolidando a FALP como la principal institución oncológica al servicio de nuestro país.
Su gestión con enfoque de Modelo de Salud Social, nació de la convicción que tenía respecto a que el cáncer no solo es un problema médico, sino también social; reconociendo las brechas de acceso económicas y geográficas en la prevención, detección temprana y
tratamiento. Para él estaba claro que cuando una persona se enferma toda la familia se ve afectada. Por ello, enfatizaba en la necesidad de abordar el cáncer de manera colaborativa, involucrando tanto al Estado como a la sociedad civil. Ese fue el espíritu que le imprimió a
FALP, cuyo impacto social le valió el reconocimiento de la Fundación Conecta Mayor UC y El Mercurio como uno de los 100 Líderes Mayores en 2024.
Sin embargo, su mayor legado fue el enfoque humano que le dio a la Fundación, entendiendo que detrás de cada avance y proyecto hay personas que lo hacen posible. En este sentido, estaba convencido de que para entregar un buen trato a los pacientes, los
colaboradores deben sentirse bien tratados, ya que “para contener tienen que estar contenidos”. “Las personas son la llave maestra para el desarrollo, la excelencia y el trato cálido que tanto valoran quienes enfrentan el cáncer”, decía.
Don Alfredo, como cariñosamente le llamábamos, tenía una profunda visión humanista, que lo hacía confiar en las personas y en el compromiso colectivo. Así logró imprimir un sello único, creando un ambiente en el que los colaboradores se sienten motivados y seguros
para aportar lo mejor en sus respectivos roles, llevando a FALP ser reconocida entre las 10 finalistas del Premio Carlos Vial Espantoso a las relaciones laborales en 2024, siendo la primera y única institución de salud en recibir este reconocimiento.
Hoy despedimos a un líder extraordinario, pero principalmente a un ser humano cuya empatía, visión y compromiso, transformó la vida de miles de personas. Su legado perdurará en los valores y principios que dejó establecidos en FALP, y sus acciones continuarán siendo
una gran fuente de inspiración.
La familia Comandari Andueza y los colaboradores de Fundación Arturo López Pérez agradecen el apoyo y las muestras de cariño recibidas en estos momentos tan difíciles. En honor a su memoria, FALP continuará operando bajo los principios que él defendió y su
visión seguirá siendo la hoja de ruta que guiará nuestras acciones futuras.
Para despedirlo, se llevará a cabo el velorio mañana sábado 18 de enero a partir de las 11.00 horas en la Parroquia San Francisco de Sales y la misa el domingo 19 de enero a las 09:00 horas en la misma iglesia.
Fundación Arturo López Pérez.