“Estamos operando en un escenario de mucha incertidumbre”.
Un centenar de misiles fueron lanzados a las ciudades israelíes de Tel Aviv y Jerusalén, por parte de Irán. Hecho que acrecienta aún más la tensión en Medio Oriente.
Esta acción sería en respuesta a la invasión terrestre que inició Israel, horas antes del bombardeo, sobre la frontera sur del Líbano, país que forma parte del “Eje de la Resistencia”, una alianza que es liderada por Irán.
Acción israelí que tenía como objetivo acabar con la infraestructura terrorista en la zona y que pertenecería a Hezbolá, según indicaron las Fuerzas de Defensa de Israel.
Esta situación se da tras el asesinato del líder de Hezbolá, Hasán Nasrala, en medio de un bombardeo que afectó a la capital del Líbano, Beirut, el pasado viernes.
“El grado de incertidumbre es tal, que nos encontramos operando en análisis de escenarios muy contrapuestos”, señaló en conversación con 24 Horas, el analista internacional, Guido Larson.
“Por un lado, efectivamente la operación es limitada y, tal vez, de aquí a un plazo de dos semanas estemos discutiendo sobre un cese al fuego o bien, un escenario que represente una escalada cualitativa que no se ha visto”, agregó.
Cabe señalar que, este conflicto se vio agudizado tras las declaraciones del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en la Asamblea General de la ONU, donde rechazó la propuesta de cese al fuego.
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