El Consejo del Banco Central decidió este jueves bajar la tasa de interés de política monetaria en 50 puntos base, dejándola en un 6%. Este acuerdo fue adoptado por la unanimidad de sus miembros.
Mediante un comunicado, el organismo autónomo señaló que, en el ámbito externo, la inflación mundial continúa disminuyendo, “aunque a un ritmo más moderado debido a la elevada persistencia de los componentes de servicios”.
En cuanto al mercado financiero local, tanto las tasas de interés de largo plazo como la bolsa muestran “movimientos acordes con los de sus pares externos”. A lo anterior, indican que “el peso, en cambio, ha mostrado una apreciación mayor a la de otras monedas comparables, de la mano del mencionado incremento en el precio del cobre”.
“El crédito sigue exhibiendo tasas de variación anual acotadas, en línea con la evolución del ciclo macroeconómico. Las tasas de interés de las colocaciones a plazos más corto han continuado reflejando la transmisión de las bajas de la TPM”, agregan.
“Las hipotecarias, más vinculadas a las tasas de largo plazo, siguen altas. La morosidad ha crecido en todas las carteras”, complementa el Banco Central.
En cuanto a la inflación acumulada de marzo y abril, el Banco Central comenta que “estuvo en línea con lo previsto en el último IPoM”. Además, “la variación anual del IPC —serie referencial empalmada— se ubica en 3,5% tanto para la inflación total como subyacente —IPC sin volátiles—”.
“En cuanto a las expectativas de inflación a dos años plazo, tanto la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) como la Encuesta de Operadores Financieros (EOF) se encuentran en 3%”, añaden.
Por lo tanto, el Consejo prevé que “en línea con el escenario central del IPoM de marzo, la TPM seguirá reduciéndose“.
“La magnitud y temporalidad del proceso de reducción de la TPM tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la Inflación”, sostienen.