La encuesta Chile nos Habla de la Universidad San Sebastián, además reveló que creció la proporción de quienes consideran que el proyecto de
ley que busca implementar los fallos de la Corte Suprema empeorará la atención de salud de las personas en Isapres y Fonasa.
En momento de grandes definiciones para el sistema de salud en Chile, 82,8% de las personas manifiestan su preferencia por poder elegir quién administre las cotizaciones de salud. Así lo reflejan los resultados de la segunda Encuesta Chile Nos Habla Salud, entregados por la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián, a través de su Centro de Políticas Públicas, en conjunto con el Instituto de Políticas Públicas en Salud (IPSUSS).
La nueva entrega de la USS evidencia que, ante la pregunta de cuán importante es para Ud., poder elegir el consultorio o centro médico donde atenderse, el profesional de salud, el hospital o clínica y el establecimiento de toma de exámenes, más de 90% de los encuestados señaló que es muy o bastante importante.
Asimismo, se evidencia una preferencia mayoritaria por un sistema mixto de aseguramiento, ya que 65% de los encuestados se muestra de acuerdo con la coexistencia de entidades privadas y estatales. En cuanto a la participación únicamente de entidades privadas o estatales, los grados de acuerdo son bajos, con proporciones para quienes están en desacuerdo que alcanzan 89 y 59,3%, respectivamente.
La medición también muestra que existe disposición a la solidaridad dentro del sistema de salud. En efecto, ante la opción de eliminar las preexistencias, 43,5% declara estar de acuerdo con pagar más para que nadie pueda ser rechazado por su estado de salud.
Enrique Paris, presidente del IPSUSS de la Facultad de Medicina de USS, resalta la importancia de estos resultados señalando que “8 de cada 10 de las personas encuestadas expresan un convencimiento de que debe existir la libertad para elegir, tanto al prestador de salud como a la institución aseguradora”.
Respecto a la opción de eliminar las preexistencias, Paris profundiza en los resultados, señalando que “más de 40% de las personas manifiestan
positivamente su intención de realizar pagos adicionales con tal de evitar que las personas sean rechazadas por su estado de salud. Una opción que
se presenta de manera transversal, tanto en usuarios de Fonasa como de Isapres, con 43,5% y 43,2%, respectivamente”.
Calidad del sistema de salud y satisfacción de las personas La encuesta mide también el nivel de satisfacción de las personas con la atención
en salud. Quienes declaran haberse atendido en un prestador público en los últimos 12 meses, presentan menores niveles de satisfacción en diversos ámbitos que los usuarios de instituciones privadas. Respecto de la disponibilidad de horas, 26,5% señala estar satisfecho o muy satisfecho con la atención de prestadores estatales, cifra que es de 66,8% en el caso de entidades privadas. En cuanto al tiempo de espera para ser atendido, los porcentajes son de 29,6 y 61,9%, respectivamente y, en el caso de la satisfacción con la respuesta a su necesidad, las cifras son de 39,1 y 70,4%, respectivamente.
Consultados por la calidad de la atención recibida, las entidades públicas presentan una evaluación más baja que las privadas, lo que se refleja en que la proporción de personas que señala estar satisfecho o muy satisfecho en los prestadores públicos va entre 26,4 y 29,2% y en los prestadores privados entre 64,1 y 70,3%.
Una diferencia que no ocurre en el caso de la evaluación de los aseguradores.
Ante la pregunta “¿cómo evaluaría en términos generales la calidad de atención de Fonasa y las Isapres?, entre los usuarios de cada una, ambos grupos declaran niveles similares de satisfacción, con 48,8 y 49% señalando que es buena o muy buena, respectivamente.
Carolina Velasco, directora de estudios de IPSUSS explica los hallazgos en cuanto a la evaluación de los usuarios.
“Se da un fenómeno curioso, ya que la experiencia usuaria es más negativa que la percepción que tiene la opinión pública de la calidad de la atención que otorgan los prestadores. En efecto, entre 36,6 y 46,5% de los encuestados señala que la atención de los hospitales, consultorios y personal de la salud pública es mala o muy mala, pero entre quienes sí han utilizado los servicios estatales el porcentaje de quienes manifiestan estar bastante o muy insatisfechos es de 43,8 a 59,5%. En cualquier caso, esto es un llamado a tomar en cuenta la opinión y experiencia usuaria en las políticas, optimizando el uso de los recursos en salud, especialmente en lo que se refiere a la disponibilidad de horas y tiempos de espera, pero también en la resolución de las necesidades de las personas”.
Ley corta y reforma: el futuro del sistema de Salud Las expectativas sobre la situación del sistema de salud para los próximos 3 años
no cambian entre la medición de agosto 2023 y de marzo 2024. Mientras la proporción de personas que declaran que la situación del sistema de salud (público y privado) en Chile empeorará pasó de 27,5 a 32,6%, y el porcentaje que declara que seguirá igual de 53,3 a 48,1%, la cifra para quienes declaran que mejorará se mantiene cercana a 19%.
Sobre el proyecto de ley que busca implementar los fallos de la Corte Suprema, la encuesta registra un aumento de la proporción de personas que cree que la llamada “ley corta” empeorará la atención de salud de las personas, tanto en Isapres como en Fonasa. En comparación con la medición anterior, este porcentaje sube de 30,3 a 39,8% para las Isapres y de 24,9 a 39,3% en el caso de Fonasa.
Abrirse a modificaciones para buscar un acuerdo con los distintos sectores (44,1%) y considerar la propuesta de los expertos convocados por el
Congreso (33,5%), son las opciones que se presentan con más menciones entre los encuestados.
La encuesta deja de manifiesto que existe una amplia mayoría que apoya la necesidad de una reforma completa al sistema de salud, con 81,1% que está muy o bastante de acuerdo. Además, al preguntar respecto de la necesidad de una reforma al sistema público de salud, 82,3% se manifiesta muy o bastante de acuerdo, y 66,7% se manifiesta muy o bastante de acuerdo con la necesidad de una reforma al sistema privado de salud, identificando al gobierno como el actor más relevante para buscar una solución (55%).
“Estos resultados demuestran que las personas esperan del gobierno una mayor acción encaminada a dar estabilidad al sistema de salud y un rol más
activo en impulsar una reforma a la salud, que permita dar sustentabilidad en el tiempo al sistema privado de salud, terminando con la incertidumbre que afecta hoy a las familias chilenas”, señala Patricio Fernández, profesor del Magíster en Dirección y Gestión Estratégica en Salud, de la Facultad de Economía y Gobierno USS.
Enrique Paris
Presidente del IPSUSS, Universidad San Sebastián