Las frutas y verduras de diferentes colores son esenciales, así como la incorporación de las legumbres en la dieta al menos dos veces por semana.
Octubre es el mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama. Durante este periodo se busca que medios de comunicación, universidades y organizaciones sociales, entre otros, contribuyan con la educación, prevención y la detección precoz de dicha enfermedad.
Ya conocemos la importancia de atender oportunamente a las señales del cuerpo y hacerse con cierta frecuencia la mamografía. ¿De qué otra manera nos podemos cuidar? La alimentación también ofrece alternativas.
Según explica Bárbara Flores, nutricionista de Edenred, empresa líder mundial en el rubro de servicios y beneficios laborales, “la recomendación general para evitar cualquier enfermedad es llevar adelante una alimentación sana: las frutas y verduras de diferentes colores son esenciales.
Además, es importante beber agua, preferir cereales integrales e incorporar legumbres al menos dos veces por semana. Los frutos secos y el pescado también juegan un rol importante”.
En cuanto a los alimentos que es deseable evitar, la profesional sostiene que “los alimentos cárneos y ultra procesados, además de las frituras y las azúcares están más relacionados con los radicales libres, que finalmente promueven un ambiente propicio para la multiplicación de células
cancerígenas”.
La nutricionista, que además está encargada del programa de calidad de vida laboral Gustino de Edenred, lleva varios años promoviendo hábitos saludables en el mundo laboral a través de dicha iniciativa. “Una buena calidad de vida, tanto en el entorno laboral como fuera de éste, siempre va
a ayudar a prevenir enfermedades. El programa Gustino tiene un enfoque que apunta en esa dirección”, sostiene.
Flores también recomienda, para aquellas que estén llevando a cabo un tratamiento contra el cáncer, preferir una alimentación lo más natural posible, ojalá preparaciones caseras. De todos modos, advierte que se trata de un proceso que requiere acompañamiento a fin de que no exista
una pérdida de peso importante que pueda perjudicar el sistema inmune y la salud de la paciente en general.
Finalmente, la profesional destaca que para disminuir las posibilidades de cualquier enfermedad existe una mezcla de factores importantes a tener en cuenta: tener estilos de vida saludables, intentar mantener un peso normal, realizar actividad física regular y evitar el consumo de tabaco y
alcohol.