El recorrido consistió en la revisión técnica de predios en Chanco y
Quilacahuiín. El proyecto integra un compromiso de tres años para la
producción de uvas de calidad para vinos y espumantes.
Una nueva oportunidad productiva y de negocios, es la que se genera con
este proyecto del Fondo de Innovación para la Competitividad del
Gobierno Regional de Los Lagos y la Universidad Santo Tomás.
La iniciativa busca aprovechar las condiciones climáticas y de suelo de las
comunas de San Juan de La Costa y San Pablo, para la producción de vinos
y espumantes de una reconocida calidad. Este polo vitivinícola ha tenido
experiencias exitosas como las de Ribera Pellín que ganó el premio al
“Vino más innovador” en las viñas del sur, por parte de la Revista Wikén,
entre otros reconocimientos.
En ese sentido, la integración de comunidades indígenas en la zona abre la
puerta para que quienes estén interesados y tengan la capacidad técnica,
pueden cultivar estas uvas de calidad y aprender importantes herramientas
para la producción de este tipo de frutales.
Nuevas opciones de desarrollo para la agricultura familiar campesina
El Director Regional de INDAP, Carlos Gómez Hofmann, destacó estas
visitas técnicas “Estamos realizando un diagnóstico, para poder seleccionar
a nuestro agricultores de comunidades indígenas en San Pablo y San Juan
de la Costa para que puedan desarrollar este proyecto de viñas en la Región
de Los Lagos.
Estamos buscando condiciones de suelo y de agua, que cumplan para viñas
de dos variedades: Pinot Noir y Chardonnay en vinos y espumantes.
Esperamos encontrar a los agricultores, ya que abre una importante abanico
de posibilidades comerciales.
Por su parte Rodrigo Moreno, Director del Proyecto de Viñedos GORE-
UST, señaló que si los agricultores se suman al proyecto “hay un proceso
de dos años, que tiene acompañamiento y en donde aprenden los manejos
de una viña, desarrollando una expertise local, ya que no todas las viñas
tienen el mismo lugar y la misma ubicación.
En ese proceso pueden aprender a reproducir plantas, a desarrollar
iniciativas de asociatividad y cooperativismo, para que integren todas las
herramientas que se le entregarán. Finalmente al tercer año tendrán una
producción importante, en donde podrán comercializar su fruta a precio
justo, con viñas que la necesiten y estén mirando a la región”.
Finalmente Joel Canquil, Presidente del Consejo de Comunidades de San
Pablo, destacó esta iniciativa “nos pareció interesante, porque es un
proyecto que viene a complementar el generar recursos. No es un proyecto
invasivo para nuestras comunidades, porque hoy en día se caracterizan en
producción de hortalizas en pequeñas cantidades, por lo tanto es algo que le
va a entregar las herramientas para generar recursos adicionales”.
El proyecto tiene un compromiso inicial de dos años para la correcta
implantación y enraizado de la vid, para la producción de la materia prima
de este nuevo polo de desarrollo de vinos en nuestro país.