Durante 3 meses los estudiantes se capacitan en materias prácticas y teóricas lo que les permitirá desenvolverse profesionalmente en las diversas compañías contratistas que se encargan de las brigadas, entregándoles la posibilidad concreta de optar a una fuente laboral.
Emoción y satisfacción eran los sentimientos que predominaron en la graduación de la Décima Escuela de Linieros desarrollada por el Grupo Saesa, que tiene por finalidad la formación y capacitación de jóvenes interesados en ser parte del grupo de Linieros que se desempeñan en las diversas brigadas de la compañía.
A llegaron los egresados, sus familias, representantes de empresas contratistas y del Grupo Saesa, los que fueron testigos del intenso trabajo y formación de los jóvenes.
Esta Escuela de Linieros, única en el país, este año cumple su décima versión, siendo la primera la desarrollada en el año 2016. Desde esa fecha ya se ha visto como 164 estudiantes han culminado sus estudios, convirtiéndose en parte de los equipos técnicos que velan por el buen funcionamiento del suministro.
Para María Dolores Labbé, Gerente de Personas de Saesa, el trabajo que realizan los Linieros “es un orgullo para la compañía, es uno de los grandes hitos o proyectos que hemos impulsado en los últimos años. Hoy ya estamos en la décima titulación, con más de 160 egresados. La verdad ha sido un impulso muy importante, en un trabajo colaborativo entre las empresas contratistas, nosotros mismos con nuestros instructores, por lo que le hemos ido dando fuerza a este proceso de formación y de incorporación de mano de obra a nuestras empresas contratistas”.
Dentro de los conocimientos entregados, estaba la misión de traspasar a cada uno de los estudiantes, la cultura de seguridad que posee Grupo Saesa, situación a la que se refirió Patricio Velásquez, Subgerente de Prevención de Riesgos de la compañía el que indicó que “estamos capacitando y entrenando personal nuevo que se va a incorporar a nuestras filas de operación de régimen normal, con mejores competencias, con más entrenamiento, con más actitud y eso a nosotros nos llena de orgullo”, culminó.
Capacitación y fraternidad
Durante la ceremonia, se pudo constatar que los estudiantes hablaban sobre la rigurosidad que tenían sus instructores a la hora de capacitarlos, los que traspasaron sus conocimientos a los 25 egresados, quienes a su vez destacaron la buena convivencia del grupo.
Así al menos lo relató Juan Chauquepil, ahora miembro de la empresa CAM y uno de los estudiantes que culminaron el proceso de capacitación. “Fue un proceso muy bonito. En lo personal me gustó los lazos que se forman y lo aprendido en esta capacitación”.
Opinión similar es la que entregó Luis Queipul, otro de los egresados y ahora parte del equipo de la empresa Ingen SPA, “La escuela estuvo buena. Los profesores son buena onda y enseñan bien. Son dedicados a sus alumnos, responden con claridad a nuestra dudas”, culminó Queipul.
Emotiva ceremonia
La ceremonia, no solo contó con la presencia de los egresados, sus instructores y autoridades de la compañía, sino que también con familiares de los estudiantes, quienes se mostraron emocionados por el logro personal de sus familiares, que ahora cuentan con herramientas para trabajar de la mano con el Grupo Saesa.
“Estoy feliz y orgullosa de mi hijo, ya que es algo que le va a servir en su futuro, para trabajar y salir adelante. Todo depende del esfuerzo que le ponga”, expresó una emocionada Nancy Carrasco, madre de uno de los recién egresados.
En tanto Edith Derneder manifestó lo agradecida que se encuentran muchas familias, por esta oportunidad que el grupo Saesa les entrega a estos jóvenes. “Estoy aquí viendo un logro más de mi hijo, un diploma que le entrega la empresa Saesa con la Escuela de Linieros. Me siento feliz, es un logro más para él, por lo que le deseo que le vaya muy bien en la vida”, culminó la orgullosa madre.